Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá ( T- MEC ) 2da. Parte

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Un álgido camino hacia el establecimiento de una nueva relación comercial
Segunda Parte

Continuando con algunos aspectos a importantes que vale la pena resaltar derivado de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), a continuación, la segunda y última parte de los principales aspectos contenidos en el El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá mejor conocido como T-MEC:

Propiedad intelectual

En este nuevo acuerdo se moderniza y aumentan los estándares sobre propiedad intelectual, otorgando fuerte protección a los innovadores farmacéuticos y agrícolas. Además, exige un trato igualitario de derechos de autor para escritores, compositores y otros.

El nuevo acuerdo aborda algunos de los problemas que han surgido en los últimos 25 años. Por ejemplo, describe las sanciones penales por realizar la piratería de películas en línea, tema que estaba totalmente rebasado en el actual TLCAN.

Comercio Electrónico

Este es uno de los aspectos novedosos en el nuevo tratado, ya que se moderniza el comercio electrónico, tema que apenas existía cuando el TLCAN entró en vigor hace un cuarto de siglo, derivado de ello, este aspecto fue clave en la negociación del nuevo acuerdo comercial. El T-MEC prohíbe los derechos aduaneros para productos distribuidos digitalmente, como software y juegos, libros electrónicos, música y películas e incluye protecciones de propiedad intelectual más fuertes, incluidas las patentes de servicios financieros y biotecnología.

Se regula el comercio por medios electrónicos de productos digitales, tales como programas de cómputo, imagen, texto, video, grabación de sonido u otros productos que estén codificados digitalmente y que puedan ser transmitidos electrónicamente.

Pactos con China

Respecto a este tema hay una disposición en el T-MEC específicamente diseñada para evitar que Canadá o México busquen un mejor tratado comercial con China.

Si alguna de las naciones firmantes intenta entablar un acuerdo de libre comercio con un país sin economía de mercado (entiéndase China), las otras partes podrán cancelar el acuerdo trilateral y reemplazarlo por uno bilateral.

Los lazos de EU con China se han vuelto cada vez más polémicos, y Norteamérica ha aplicado aranceles a importaciones de ese país por muchos millones de dólares en afán de tratar de inhibir la actividad comercial con ese país.

Derechos laborales

De conformidad con la información publicada por la Secretaría de Economía, el principal objetivo de México respecto del T-MEC es promover la aplicación de los derechos laborales fundamentales en la legislación laboral; garantizar la protección a los trabajadores migrantes; impulsar una agenda de cooperación que permita la aplicación de los derechos laborales fundamentales y fomentar el diálogo para atender diferencias relativas a la aplicación de los compromisos del Capítulo.

México se compromete con acciones legislativas específicas para garantizar el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva.

Derivado de lo anterior, México ha realizado reformas a su legislación laboral, la cual, entre uno de los aspectos más relevantes de dicha reforma, es acabar con el “sindicalismo charro” de antaño, ya no se podrán llevar a cabo asambleas a modo para que los líderes sindicales permanezcan de manera eterna como secretarios generales de los sindicatos, para ello, se establece que se deberán llevar a cabo asambleas con los trabajadores sindicalizados y realizar una elección democrática de sus representantes, todo ello avalado por la Secretaría del Trabajo.

Lo anterior, de llevarse efectivamente a cabo, representará sin lugar a dudas un gran avance en materia laboral.

Energía

Reflejando las preocupaciones del gobierno entrante de México, de que el acuerdo limitaría el control del país sobre sus recursos petroleros, se establece que México tiene la propiedad directa, inalienable e imprescriptible de todos sus hidrocarburos en su subsuelo.

A pesar de la redacción utilizada en el T-MEC y mediante la cual aparentemente se acabaría la participación de empresas extranjeras en la explotación de hidrocarburos, el capítulo de energía no impide que las compañías petroleras extranjeras produzcan petróleo en México bajo una liberalización de la industria aprobada por el gobierno saliente.

Combate a la corrupción

El Capítulo Anticorrupción es un Capítulo novedoso y de reciente introducción dentro del TMEC, ya que no existían disposiciones similares dentro del anterior TLCAN.

El citado Capítulo Anticorrupción tiene por objeto determinar medidas que las Partes del T-MEC deben adoptar, a efecto de prevenir y combatir el soborno y la corrupción en el comercio internacional para fomentar la inversión. Dichas medidas deberán adoptarse, tanto en el sector privado como en el sector público, en cuanto a transacciones que estén cubiertas por el T-MEC. Para todo esto existe un capítulo específico y muy amplio en el que se establece a detalle los aspectos a cubrir.

No obstante ello, la tipificación de conductas y delitos, deberán adoptarse en los ordenamientos jurídicos internos de cada una de las Partes.

Medio Ambiente

Cuando el TLCAN fue firmado en 1994, fue el primer Tratado en vincular el Medio Ambiente y el Comercio a través de un tratado paralelo que contenía disposiciones en Materia de Medio Ambiente.

Ahora con el T-MEC se incluyeron dichas disposiciones actualizadas en un Capitulo exclusivamente para la regulación en materia de Medio Ambiente.

Estas disposiciones tienen la intención de promover entre los estados firmantes, la protección del medio ambiente en un contexto de apertura comercial, fomentando entre las partes la correcta y debida aplicación del orden normativo en materia ambiental y en consecuencia fortalecer la aplicación de las obligaciones y compromisos adquiridos en acuerdos multilaterales en materia de medio ambiente.

México sería el primero en ratificar el T-MEC, prevé la Secretaría de Economía

Graciela Márquez Colín, secretaria de Economía, pidió al Senado ratificar el nuevo tratado comercial de América del Norte, cuando se tenga certeza de que los congresos de Estados Unidos y Canadá también lo harán.

En este sentido, el gobierno federal buscaría que México fuera el primero en ratificar el nuevo tratado comercial con Estados Unidos y Canadá, pero deberá hacerlo sólo cuando se tenga la seguridad de que los otros países también lo harán.

Derivado de lo anterior, el pasado 19 de junio la cámara de Senadores de México realizó la aprobación del T-MEC y fue enviado al ejecutivo federal para su ratificación.

Con la aprobación del T-MEC por parte del Senado mexicano se pretende enviar una clara señal de certidumbre a los inversionistas y consumidores, a favor de una economía abierta y de profundizar la integración económica en la región de Norteamérica, según comentarios de la Secretaría de Economía.

¿Qué tan seguro está el T-MEC?

El gobierno federal, junto con Canadá, impusieron una condición indispensable para el correcto tránsito legislativo del T-MEC: era necesario que el gobierno de EU termine con los aranceles al acero y al aluminio que impuso a sus dos socios comerciales.

Aunque México y Canadá pueden aparecer como los grandes beneficiarios de la ratificación de un acuerdo de comercio libre con Estados Unidos, este último también tendrá grandes beneficios con la firma de este acuerdo comercial, México ya aprobó el T-MEC, respecto a Canadá aún no se tiene garantizada la aprobación legislativa, aunque es muy probable que si se lleve a cabo.

Por otra parte, las acciones recientemente emprendidas por el presidente norteamericano Donald Trump han obstaculizado la aprobación del T-MEC por parte del Senado de EUA: ¿Cómo es posible que EUA imponga aranceles al acero y al aluminio a sus dos socios comerciales?, por otra parte, el presidente Donald Trump en plena campaña electoral hacia su reelección presidencial, hizo uso de sus conocidas estrategias de negociación mezclando un tema migratorio con un tema político- económico, mediante el cual amenazó con la imposición de aranceles a todos los productos que se importaran desde México, debido a que según Trump, México no ha hecho lo suficiente para evitar el flujo migratorio que se incrementó en los últimos meses, y de acuerdo a Trump, esto representa una amenaza de seguridad nacional para los EUA; la imposición de estos aranceles iniciaría el 10 de junio de 2019 con un 5% que se incrementaría cada mes en un 5% adicional hasta llegar a un arancel del nivel del 25%, situación que de llevarse a cabo sería un desastre económico para México y EUA, claro, con mayores repercusiones para nuestro país.

Afortunadamente el gobierno mexicano a través de su cancillería logró acabar con esta amenaza, sin embargo se tuvieron que ceder a las exigencias del presidente Trump, con lo cual México se vio obligado a modificar su estrategia en materia de migración de los centroamericanos hacia EUA, con los costos políticos y económicos que ello representará para el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

No es posible tener en el papel un acuerdo comercial firmado y en vías de ratificación y en la práctica la amenaza de imponer sanciones comerciales como estrategia de negociación por parte de los EUA.

Por lo que respecta a Canadá, el panorama político del primer ministro Justin Trudeau se complicó en meses anteriores derivado de diversos escándalos de corrupción dentro de su gobierno y esto ha debilitado a su partido, el liberal, en la antesala de las elecciones para el próximo otoño.

Respecto a los Estados Unidos, donde todo pasa por el tamiz de la política interna, los primeros opositores a los que el presidente Donald Trump terminara con una orden ejecutiva con el TLCAN fueron los demócratas, pero los primeros que hoy regatean la aprobación del acuerdo que salvó la relación trilateral son los propios demócratas.

Y es que la relación comercial con México fue tema de campaña para Trump. “El peor acuerdo comercial de la historia”, repitió hasta el cansancio. Y el T-MEC lo vende como su gran triunfo negociador. ¿Cómo querría el Partido Demócrata con visión electoral al 2020 hacerle el favor legislativo al candidato a la reelección del Partido Republicano? No es un asunto sencillo, pero al final, después de muchas discusiones, es más probable que el senado norteamericano apruebe el T-MEC.

Consideraciones finales

Es indudable que después de casi 25 años de vigencia el actual Tratado de Libre Comercio de América del Norte, era necesario realizar una actualización al mismo.

Después de más de un arduo año de negociaciones y numerosas reuniones entre los representantes de México, Estados Unidos y Canadá, en los que siempre estuvo presente la amenaza por parte de los Estados Unidos por abandonar el TLCAN, en caso de no lograr imponer las condiciones que el Presidente Donald Trump quería.

Es obvio que a ninguno de los tres países les convenía quedar fuera de las negociaciones, no obstante que también la amenaza de los Estados Unidos consistía en que si no era posible llegar a un acuerdo de forma trilateral, entonces se buscaría llegar por parte de la Unión Americana a acuerdos bilaterales con México y Canadá de manera separada, situación que tampoco era benéfica para el gran bloque comercial que representa el TLCAN.

Los tres países tuvieron que ceder terreno en las negociaciones en afán de lograr destrabar los acuerdos que concluyeran en la aprobación del T-MEC.

Fue muy importante la inclusión de temas de vanguardia como son el medio ambiente, el comercio digital, el tema laboral y el combate a la corrupción.

Respecto al medio ambiente, era necesario tomarlo en consideración para emprender acciones que salvaguarden la protección ambiental, reducir la emisión de contaminantes y procurar la promoción de la industria limpia, claro está, en la búsqueda de preservar el impacto ambiental.

Por su parte, la incorporación del comercio digital era necesaria, y tal vez algo tardío derivado de los acelerados avances tecnológicos que han impactado en casi cualquier aspecto de nuestras vidas, y por supuesto, en el tema comercial no sería la excepción. Con la inclusión del tema del comercio digital, se puede facilitar el trato comercial entre las tres naciones integrantes del T-MEC y con ello promover de manera más ágil el intercambio comercial entre ellas.

En cuanto al tema laboral, México es el que tiene más desventaja en este rubro, debido a los grandes rezagos que tiene respecto a las normas Norteamericanas y las Canadienses, por lo que derivado de los acuerdos alcanzados en este nuevo tratado comercial, México tiene un verdadero reto, que consiste en aterrizar en la práctica las reforma legislativas recientemente aprobadas para estar en esta materia conforme a lo pactado en el T-MEC y alcanzar niveles de competitividad regional, tomando por supuesto la importancia que tendrá en el tema laboral el acuerdo alcanzado en materia de la remuneración que se deberá otorgar a los trabajadores de la industria automotriz, la cual está muy por arriba de los actuales sueldos que se pagan actualmente en México.

Por último, el combate a la corrupción, tema que no estaba contemplado de manera específica en un capítulo del TLCAN, por lo que con los acuerdos alcanzados a través del T-MEC, México, junto con Estados Unidos y Canadá, adquieren importantes compromisos en materia de prevención, combate y sanción a los actos de corrupción por parte de los particulares y las empresas del estado.

Es un hecho que fue un gran logro para los tres países el haber acordado un nuevo tratado comercial después de muchos esfuerzos y negociaciones en las que los tres países consiguieron aspectos importantes, pero también tuvieron que ceder para destrabar las negociaciones y lograr acuerdos.

Como fue comentado en la primera parte del presente artículo, la conclusión de las negociaciones concluyó el pasado 30 de septiembre, fecha en la cual se dieron por terminadas las negociaciones y se logró el nuevo acuerdo comercial, posteriormente, la firma por parte de los mandatarios de las tres naciones involucradas fue el 30 de noviembre, precisamente el último día de la gestión presidencial de Enrique Peña Nieto, el cual por qué no decirlo, se puede apuntar ese logro a su presidencia y a la excelente labor desempeñada por el entonces Secretario de Energía el Lic. Idelfonso Guajardo.

Una vez firmado el tratado, y aprobado ya por el Senado Mexicano, aún no es procedente “echar las campanas al vuelo” debido a que aún está pendiente de que el T-MEC sea ratificado por los congresos de EUA y Canadá.

El tema se empieza a complicar con Estados Unidos, en donde hay una clara división y visiones encontradas entre los representantes de los partidos Demócrata (partido de oposición) y el Republicano (partido en el poder), y ante la eventual campaña política y deseos de relección del Presidente Donald Trump, el tema político podría contaminar la ratificación del T-MEC y atrasar su aprobación.

Por su parte Canadá también se encuentra inmerso en temas políticos que pueden dificultar la ratificación del T-MEC, lo anterior debido a los casos de corrupción que han surgido en el gobierno del Primer Ministro de Canadá.

Mientras tanto, aún falta camino por recorrer para poder anunciar el inicio de la vigencia del T-MEC, debido a que se prevé que la ratificación pueda realizar en términos optimistas en el transcurso de 2019, para que entre en vigor para el año 2020, y en términos pesimistas, de ratificarse esto podría suceder en el año 2020, entrando en vigor para 2021 el nuevo T-MEC.

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