¿Qué es el Brexit?

image

Al término de la Segunda Guerra Mundial, los países europeos enfrentaban una de sus peores crisis económicas. No sólo Alemania quedó devastada, sino que Francia, Italia y varios países más, también enfrentaban pérdidas importantes. Por otro lado, la cooperación, como medio para enfrentar la reconstrucción no se veía fácil, dados los resentimientos y la desconfianza que prevalecían entre las naciones europeas.

En ese contexto, el 9 mayo de 1950, es decir, cinco años después de terminadas oficialmente las hostilidades, Robert Schumann, Ministro de Asuntos Exteriores de Francia, propuso a las naciones europeas la suscripción de un Acuerdo bajo el cual sometieran a una autoridad común, el manejo de sus respectivas producciones de acero y carbón.

La propuesta, si bien importante, no era novedosa. Ya en 1946, Winston Churchill, en un discurso pronunciado en Zurich, había propuesto crear la familia europea, dotándola de una estructura bajo la cual pudiera vivir en paz, con seguridad y libertad. Concretamente proponía crear una especie de Estados Unidos de Europa.1   

Ese es el marco bajo el cual seis países europeos (Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos), suscribieron en 1951 el Tratado que dio origen a la Comunidad Europea del Carbón y el Acero (CECA), punto de partida de uno de los procesos de integración más rápidos y exitosos del mundo.
El paso siguiente fue la firma de los Tratados de Roma, en 1957, en los cuales se plasmó la meta de constituir un “mercado común” que permitiera la libre circulación de personas, mercancías y de capitales. Este fue el origen de lo que en la actualidad constituye la denominada Unión Europea, entidad de carácter supranacional, que en los últimos cuarenta años ha aceptado la adhesión de 22 naciones:

La Zona del Euro nació en 1999.  Es uno de los resultantes del Tratado de la Unión Europea2 , con el cual se dio forma a la ciudadanía europea, se permitió circular y residir libremente en los países de la comunidad y se creó el Euro, como moneda única europea, que entró en circulación en 2002 bajo el control del Banco Central Europeo.
Hoy en día, el euro es la moneda oficial en 19 de los 28 Estados miembros de la Unión Europea:

  • Los 11 Estados fundadores: Alemania, Austria, Bélgica, España, Finlandia, Francia 3, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Países bajos y Portugal;
  • Ocho Estados se han incorporado: Chipre, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Grecia, Letonia, Lituania y Malta;
  • Seis países se encuentran en proceso de instrumentación: Bulgaria, Croacia, Hungría, Polonia, República Checa y Rumania.
  • Reino Unido 4, Dinamarca y Suecia (los dos últimos mediante referéndum), no han adoptado la moneda única.

Por otro lado, otros 4 Estados europeos, no miembros de la Unión Europea (Andorra, Mónaco, San Marino y Vaticano), tienen acuerdos suscritos con ésta para el uso del Euro como moneda común y otros dos lo adoptaron de manera unilateral (Montenegro y Kosovo).

  • Situación Actual.

Desde el 2008, la economía de la mayoría de los países miembros de la UE se ha visto afectados por la crisis económica y financiera internacional, a la cual posteriormente se agregaron la de Irlanda, España, Portugal y Grecia.

Lo anterior, el impacto que ha tenido en el Euro y recientemente la crisis de los migrantes, motivó el regreso de controles migratorios a algunas fronteras internas y ha puesto a prueba la solidez de la Unión Europea.

La conjunción de estos factores dieron, a la izquierda y derecha británicos, los argumentos necesarios para promover el abandono de la Unión Europea: unos fueron atraídos por la promesa de que el “Brexit”, es decir, su salida de la Unión Europea, daría fin a los problemas de la inmigración, y otros a los desplomes en los ingresos y recortes al gasto público 5.

El resultado, no esperado ni por los propios promotores del “Brexit”, fue que en el referéndum celebrado el 23 de junio pasado, el 52% del electorado británico votó por la salida del Reino Unido de la Unión Europea, contra el 48% que votó en contra.

Las consecuencias económicas no se hicieron esperar: la libra esterlina se desplomó 9.5% frente al dólar, su mayor caída en treinta años; la Bolsa de Valores se desplomó; y la calificación de Gran Bretaña bajó, afectando con ello a las empresas británicas.

La inestabilidad financiera se extendió de Londres al mundo: los tipos de cambio de las principales monedas se vieron afectados, cayeron las bolsas de valores del mundo y los precios del petróleo y sin bien paulatinamente se recuperó la calma, debe tomarse en cuenta que hasta el momento sólo se tomó la decisión.  El proceso de negociación sobre los términos de la salida aún no se inicia y cuando este de inicio, durará un par de años.

Hasta el momento sólo se ha vivido la “incertidumbre” que una decisión de este tipo puede generar. La mayor dificultad y los mayores problemas están por venir, ya que facilitar el proceso puede inducir nuevas salidas, en un momento de dificultades económicas para varias naciones europeas, pero dificultarlo puede generar costos excesivos al Reino Unido y a otros Estados europeos.

  • Consecuencias para México.

El impacto para México puede ser más bien de tipo indirecto, ya que sólo intercambia un pequeño porcentaje de su comercio con Europa (6%) y específicamente con el Reino Unido es aún menor (0.5%).  Nuestro principal mercado siguen siendo los Estados Unidos.

Sin embargo, la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea significa que se reducirán las ventajas que se derivan del libre comercio y de aduanas, entre otras, lo que afectará la actividad económica global y con ello las corrientes de comercio con nuestros socios comerciales, todo lo cual afectará en forma directa las exportaciones mexicanas y con ello la actividad económica y la generación de empleos.


*     *     *     *     *


1 Lozano Diez, José Antonio. Las causas profundas del Brexit. Excélsior. Julio 2, 2016.

2 El Tratado de la Unión Europea, conocido también como Tratado de Maastricht se suscribió en 1992, sobre la base de Tratados preexistentes: el de Paris (1951), constitutivo de la Comunidad Europea del Carbón y el Acero; y los de Roma (1957), que instituyeron la Comunidad Económica Europea y la Comunidad Europea de Energía Atómica. En el mismo se consagra oficialmente el nombre de “Unión Europea”, en sustitución de “Comunidad Económica Europea”, lo que denota, por sí, que se sobrepasa el objetivo económico inicial de la Unión.

3 Los Departamentos de Ultramar franceses, como parte integrante de Francia, están incluidos en la Zona del Euro.

4 Reino Unido también se excluyó de otras decisiones adoptadas por la Unión Europea, como el que suprime los controles fronterizos y permite la libre circulación de personas entre los países.

5 Blair, Tony. El Golpe del Brexit. Reforma. Junio 28, 2016.

Consola de depuración de Joomla!

Sesión

Información del perfil

Uso de la memoria

Consultas de la base de datos