Más mentiras en el Quinto Informe de EPN

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Recuerdo aquellas imágenes de mi infancia en donde en un día de asueto toda la población se encontraba pendiente de la parafernalia que representaba el informe de gobierno del Presidente de la República en turno (por cierto todos gobiernos del viejo PRI), llegado el momento en el recinto legislativo de San Lázaro, la mayoría de los legisladores federales no hacían más que alabar al representante de su partido en el poder, y para no variar, esos informes eran fuertemente criticados en cada uno de sus rubros por la oposición al unísono de “RATEROS, RATEROS”, y que hacían más que divertidas las horas de palabras vacías, llenas de mentiras, omisiones y falsas pretensiones.

Pasados los sexenios nada cambió, otra vez el viejo PRI encabezado por EPN., presentó su quinto informe de gobierno, y que por formato ahora simplemente se entrega en una caja de lujo en San Lázaro, pero de igual manera plagado de falsedades como las que comentaremos en el presente trabajo, y que ameritan de nueva cuenta la consigna de “RATEROS”, y posiblemente a ello obedezca el nuevo formato de presentación del informe, dado que ahora nos contamos por millones los inconformes.

Indignación es lo que causa saber que de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el ingreso promedio de las familias para 2016 se incremento en $43,036.00, (http://www.beta.inegi.org.mx/contenidos/proyectos/investigacion/invenc/doc/relatoria_y_analisis_del_inegi.pdf), en el estado de Nuevo León se registró el ingreso promedio trimestral más alto con $87,653.00, (esto es, $29,217.66 mensuales); el ingreso más bajo se registró en el estado de Chiapas con un ingreso promedio trimestral de $23,258.00 (es decir, $7,752.66 mensuales), y en la CDMX el ingreso trimestral fue de $70,834.00 (esto es, $23,611.33 mensuales).

Las cifras que nos arroja el INEGI resultan sospechosas, dado que nadie cree en esos datos ni en sueños, en la Ciudad de México el ingreso promedio mensual de los hogares es de $23,611.00, supuesto que nos lleva a concluir que alguien al interior del organismo maquilló las cifras para que lucieran impecables llegado el quinto informe de gobierno.

Con certeza la mayoría de la población ya olvidó el penoso hecho de que el Gobierno Federal impuso dentro del INEGI a una incondicional del Secretario de Hacienda y Crédito Público Antonio Meade Kuribreña (antes Secretario de Desarrollo Social), en efecto, fue lamentable el episodio donde la opinión pública demandó a gritos que la C. Paloma Merodio Gómez no era digna de ocupar el cargo de Vicepresidenta de la Junta de Gobierno del INEGI, toda vez que este personaje era egresada del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), con una maestría en Administración Pública por la Universidad de Harvard; la principal razón de la oposición fue que no tenía la experiencia suficiente para ocupar un cargo de vital importancia, dado que simplemente se había desempeñado como Consultora en el Banco Mundial; Coordinadora de Investigación Estratégica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); y sobre todo al lado de Meade Kuribreña, como Directora de Evaluación y Monitoreo de Programas Sociales en la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL).

Pasado el quinto informe de gobierno, nos damos cuenta porque 30 ONG´s solicitaban que se revisara la propuesta de Paloma Merodio Gómez al cargo de Vicepresidenta de la Junta de Gobierno del INEGI, al considerar que no cumplía con los requisitos de ley; el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY) manifestó que la entonces candidata solo tenía una trayectoria de 1 año y 5 meses de experiencia laboral en un cargo de alto nivel jerárquico, cuando se requería una experiencia de 5 años, ni cumplía con el requisito de ser considerada como una académica de reconocido prestigio, por lo que su currículum revestía de ambigüedad y falsedades, más grave aún es que existe una carta firmada por 50 estudiantes y egresados mexicanos de la Universidad de Harvard quienes también se opusieron a que Paloma Merodio Gómez ocupara el cargo público al considerar que no cumplía con los requisitos de ley, pues se tenía que defender la solidez e independencia del INEGI, ya que el nombramiento del Vicepresidente de la Junta de Gobierno debe surgir de un proceso transparente, técnico y apegado a la ley. Se puede consultar el link: http://www.proceso.com.mx/481239/alumnos-egresados-mexicanos-harvard-piden-proteger-independencia-inegi-avalar-a-merodio

No obstante el llamado de organizaciones serias, al viejo PRI no le interesan las llamadas a cuenta, y sin cumplir con los requisitos de ley ordenó e impuso el nombramiento de Paloma Merodio Gómez como Vicepresidenta de la Junta de Gobierno del INEGI., por lo tanto, cómo es posible que ahora ese viejo PRI nos pida que creamos ciegamente en la transparencia de los datos del INEGI, máxime en los casos de pobreza donde la autonomía del instituto para implementar métodos de medición están más que en duda, hoy no se tiene credibilidad en sus datos, quién en su sano juicio puede creer que en la CDMX el ingreso mensual promedio es de $23,611.33.