El Internet de las Cosas

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En la casa, en el coche, en la oficina, por todos lados estamos rodeados de un sistema de comunicación inalámbrico que conecta el mundo digital con el mundo físico. Un ambiente inteligente de objetos que se hablan entre sí y que hacen nuestra vida más coordinada y organizada; es el internet de las cosas, el internet de todo, la revolución de los sensores.

Cada mañana, algunos objetos del hogar moderno se despiertan antes que tú para iniciar su coreografía diaria; rutina que no requiere de la dirección humana ni tampoco de supervisión pues son inteligentes y se hablan entre sí.

Minutos antes de que abras los ojos, tu nuevo despertador – el que compraste en Smarthome - se conecta de forma inalámbrica con la cafetera inteligente Beyond. Ya le avisó que prepare el café como te gusta, y es que cuando uno se levanta de la cama no está como para contar cucharadas de café y tasas de agua. El sistema Zonoff ya encendió las luces del cuarto de los niños y también prendió el boiler, solo te pregunta si deseas que los del gas pasen a surtir porque ya se va a acabar el energético. Desde tu Tablet, te enteras que este mes ahorraste 10% de gas, y 15% de agua.

La siguiente noticia de la mañana proviene de la Báscula Multifunción para el Control de tu Salud. Te alerta que subiste un kilo. Segurito ya le mandó ese dato a los aparatos del gimnasio; a ver que rutina te eligen automáticamente esta vez gordito. Ya te regañó también tu cepillo de dientes bluetooth; ayer te cepillaste solo en dos ocasiones y la segunda vez fue por 30 segundos; lo más seguro es que ya todos se enteraron en Facebook de tu insuficiente higiene bucal.

¡Papá ya nos vamos a la escuela! – te dicen tus hijos quienes corren a la puerta. Sus relojes Pebble detectaron vía GPS que el camión escolar ya venía dando la vuelta a la esquina. ¡Ya me voy también! – Te dice tu esposa mientras usa el celular para detectar donde dejó los anteojos; frío… frío… caliente, ¡aquí están! –Debajo de un suéter en el sillón – Los toma y parte apresuradamente; Osito le avisó que si no salía en cinco minutos le iba a tocar manifestación en Reforma.

Por tu parte, te vistes tranquilamente frente al Espejo Mágico Interactivo que te muestra sugerencias de corbata para la camisa que traes puesta. No hay porqué apresurarse, todo tu día está programado. Ya no llevas la agenda en la cabeza, todo está guardado en la nube y todos tus objetos inteligentes conectados a la red te proveen de un convincente y cómodo sustituto de la memoria. Si está en internet, no es necesario recordarlo.

Qué bueno que IPSO Alliance está mejorando el protocolo de internet para objetos inteligentes y Auto-ID-Labs hace un formidable trabajo al desarrollar la arquitectura de sensores RFID que hoy conectan los objetos (spimes) con la red. Qué bueno también que el Gobierno del Distrito Federal ya tiene disponible una aplicación para pedir Taxis. La app sabe que hoy no circulas así que afuera hay un taxi esperando para llevarte a la oficina. Puedes salir con la tranquilidad de que Mi Casa Verde va a cuidar de tu hogar mientras no estás. El programa apaga lo que se quedó encendido y cierra lo que se quedó abierto. Además NinjaBlocks vigila que ningún birlesco merodeé por los alrededores. Tampoco te preocupa que Peluche se vaya a ir a ensuciar al jardín del vecino. El collar Fitbark que trae puesto rastrea todos sus movimientos y ayer solamente ladró 15 veces lo que significa que te estás convirtiendo en diestro encantador de perros.

El taxi te lleva a tu oficina y como no traes cash pagas utilizando tu Smartphone. “Pling” es el sonido que indica que el pago se realizó correctamente; Al entrar al edificio, tu pulsera Amiigo te recomienda subir las escaleras en lugar de tomar el ascensor; ya se enteró que traes un kilito de más. Mientras estás en tu oficina, Lumoback te indica si estás sentado correctamente y a la hora de la comida, llevas registro de tus hábitos alimenticios con los cubiertos interactivos HapiFork,que miden la velocidad con la que comes. Muy rápido es malo; pausado es mejor, y el sistema te otorga una medallita de oro por cada vez que lo haces bien. La verdad no estás seguro si tantas medallitas que tienes son resultado del compromiso por tu salud o porque no quieres regresar rápido a tu escritorio.

“Bip bip” suena otra alerta en tu Smartphone, tienes un mensaje: “¡Atención!PlantLink informa: ¡Hola soy yo! Tu planta de tomates. Tengo sed, ¿Me das agua? Da clic aquí para irrigar”. Clic…sonido de agua.

El internet era un medio que solíamos utilizar para publicar y recuperar información. Vivíamos en un modelo de redes data-céntricas. Hoy la web crece exponencialmente debido a la participación de sensores que alimentan aplicaciones y plataformas. Conectividad para todos, todo el tiempo, desde cualquier lugar y de cualquier tipo.

Al finalizar la jornada laboral, decides ir al supermercado a comprar la cena. Tu esposa llegó antes. Se enteró que ibas al súper porque ella tiene un Evadofilip que le indica todos los lugares en donde te paras. Un regalito que recibió de su mamá ¡Muchas gracias suegrita!

Caminan por los abarrotados pasillos llenos de productos que muestran precios que varían dependiendo de las alzas y bajas de la bolsa de valores, así que cambian automáticamente todo el tiempo. Un mensaje en la pantalla del carrito de compras te dice “Héctor, no olvides comprar leche” y es que un sensor del anaquel de lácteos utilizó un protocolo de comunicación para entablar un diálogo con tu refrigerador, quien le contestó, a través del smartphone, que las charolas de leche estaban vacías. Hace poco la CASPIAN (Consumidores en contra de la Invasión de la Privacidad por los Supermercados) impulsó una iniciativa de ley que les prohíbe colocar al Big Brother en el carrito de compras, y es que después de que Benetton incluyó diminutos microchips en su ropa, para rastrear a través de internet a la gente que la llevaba puesta, se ha armado en verdad un escándalo. ¡Peeep!– Usted tiene un videomensaje: “Papá pedí para mi cumpleaños una muñeca 3D porfa no olvides pasar a recogerla, ya la están imprimiendo”, así que antes de partir te la entregan recién hechecita en termoplástico y fotopolímeros. Al final no fue necesario hacer fila para pagar, se te cobró mientras ibas saliendo- “Pling”.

Ya en casa lo único que quieres es relajarte y disfrutar con tu familia de una buena cena y una buena película. Película que por cierto te recomendó el tostador con internet Electrolux, un regalo de una empresa de cine online.

Con el internet de las cosas la vida se ha vuelto programable y coordinada; claro que te preocupa que un pillo digital vaya a hackearte tu mundo o que un día el refrigerador vaya a cobrar conciencia y envenene tu leche para quedarse con tu esposa, lo cual, te parece en realidad poco probable. La evolución de la red da pié a muchos aspectos por regular: la privacidad, las empresas que buscarán monetizar cada aspecto de nuestras vidas, la electro-contaminación ambiental. Pero mientras eso sucede, descargas de un sitio web, una secuencia de sueño para tu antifaz de dormir Remee. Esta noche escogiste soñar que eres Indiana Jones.